Descripción
En Coimbra aparece una forma de vestido tradicional muy característica, resultado de atar el soplillo en el cuello de la piel del cabrito, y la puntera y el roncón en las patas delanteras. Así, el soplete sale de una posición alta y viene a dar a la boca del tocador de una forma muy cómoda. Era costumbre en esta zona decorar los vestidos con cintas de colores que colgaban del lado izquierdo del tocador.
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