En las provincias de Pontevedra y parte de A Coruña los niños fabricaban antiguamente las gaitas de caña, utilizaban tubos de caña o de saúco, provistos de cañas simples (pallones) y pequeños fuelles, fabricados con vejigas de cerdo, piel de conejo o incluso una piel de un pequeño cabrito, así, los fuelles de estas sencillas gaitas crecían a medida que lo hacían los niños. En el resto de provincias gallegas los niños no utilizaban estas sencillas gaitas con fuelles, simplemente tocaban con estos mismos instrumentos pero sin fuelle. En la provincia de Lugo y parte de Ourense, los niños ni siquiera utilizaban los instrumentos de caña o saúco como instrumentos de aprendizaje, sino que empleaban gaitas de corteza de castaño, sencillos oboes fabricados con la corteza de este árbol.
Utilizando estos conocimientos infantiles, a partir de estas gaitas de caña con fuelle, desarrollamos hace seis años las primeras gaitas de caña con pallones sintéticos y escalas temperadas en Re y Do, pero con ellas no podíamos hacer cromatismos, ya que la teoría nos dice que un tubo con lengüeta simple y cilíndrica no puede emitir alteraciones mediante digitaciones de horquilla. Después de varios años investigando y persiguiendo la manera de poder realizar estos cromatismos, finalmente, utilizando un principio biológico simple, conseguimos la primera gaita de caña cromática. Aquí la tenéis, un instrumento con la tónica en Do. Vamos ahora a por la de Re.